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5 claves del juego: De regreso a casa pero con el mundo a cuestas

Como cambian las cosas es esta National Football League, evidente con la visita de la Águilas de Philadelphia que hace escasa temporada terminaban 7-9 y fuera de la gran fiesta edición 2016-17.

Ahora son los Vaqueros que de manteles largos en horario estelar del domingo en la noche reciben a esta edición de los pajarracos para reanudar la rivalidad mas añeja en la historia del equipo de la estrella solitaria, con un equipo de Jason Garrett que de pronto se encuentra seriamente tambaleando luego de lo suscitado en Atlanta.

El video fue evidencia que los refuerzos con los que se cuentan no son aptos para reemplazar a un Tyron Smith, que fue notoriamente extrañado mientras que Dak Prescott fue mandado a la lona en ocho ocasiones. La salida de Sean Lee y la falta de balance ofensivo puso a los Vaqueros en camisa de once varas, pero ahora la cosa se pone color hormiga con la visita del mejor equipo de la liga.

El balance del equipo de Doug Pederson es envidiable, siendo la ofensiva total número cuatro de la liga, corriendo el balón un promedio de 136.8 yardas por juego. Tal parece que su mariscal de campo Carson Wentz está haciendo méritos a mitad de temporada para el jugador más valioso con sus 23 pases de anotación con solo cinco intercepciones. 

Y la defensiva no se queda atrás. La frontal del coordinador defensivo Jim Schwartz es formidable, con Fletcher Cox, Tim Jernigan y Brandon Graham atacando incesantemente, siendo la número uno ante el acarreo, la mosca en la sopa el ser la número 26 ante al juego aéreo.

Con todo esto, parece que los Vaqueros van rumbo al matadero, pero nunca se puede descartar lo inesperado en estos juegos donde el octanaje se incrementa exponencialmente siendo otro capítulo del largo historial entre estos acérrimos rivales divisionales.

Clave 1 –  Vamos por partes. La desmantelada ante los Halcones Negros delató un sinnúmero de detalles, comenzando con los refuerzos en la línea ofensiva en busca de reemplazar al irremplazable. Como tackle izquierdo en esta liga, la responsabilidad que representa el cuidar el lado ciego del mariscal de campo es donde se firman los contratos multimillonarios, pero dentro de este deporte donde las lesiones se dan de momento a otro, el no tener un Plan B que reditúe es jugar con fuego. La verdad, no se espera ningún milagro con Smith en cuanto a si juega si podrá estar a su acostumbrado nivel, lo más factible es darle mayor atención a los reservas Chaz Green o Byron Bell en cuestión de ayudarles con alas cerradas e intervenciones de corredores.  Hay que también poner en movimiento a Prescott, llevando quizá esta bolsa de protección móvil a otro nivel inesperado y descartando en momentos el juego terrestre que tanto a caracterizado a la ofensiva azul y plata en busca de jugadas explosivas por las bandas y trayectorias cruzadas al centro del campo para deshacerse rápido del balón.         

Clave 2 – Estos tres ya se conocen. De nueva cuenta, con un alas cerradas capazes por parte del contrario, el nombre de Byron Jones comienza a rebotar por los pasillos en The Star en Frisco. Zach Ertz y Brent Celek son de lo mejor en la liga como dúo dinámico y Jones va a tener que estar a tono para asignación tan difícil, y sin Sean Lee en la sopa, pudiera ser una larga noche para la defensiva de Jones y compañía, tomando en cuenta que aparte estos hombres verdes corren bien el balón con un establo que incluye a LeGarrette Blount y el recién intercambio con los Delfines que les redituó a Jay Ayaji, que hasta el momento ha sido usado esporádicamente. Junto con Jones, Justin Durant va a tener que ser efectivo, y sería bueno ver que Anthony Hitchens pueda sostener su ritmo frenético durante todo el juego.

Clave 3 – Es tiempo de tirar los dados. Las Águilas van viento en popa hacia la postemporada y solo un desastre los separa del título divisional.  Para los Vaqueros, es importante reconocer a esta mitad de temporada que la meta es quedar entre los comodines para ponchar tarjeta a la gran fiesta, y en realidad, como se ha leído y comentado entre los expertos en el tema, una derrota por dolorosa que sea no manda a los Cowboys al acantilado. No es tiempo de especulaciones, pero por lo mismo, esta de por medio el regreso de Smith, Lee y hasta Ezekiel Elliott en la recta final de la temporada. Se salta a la grama para ganar, y viendo este juego en el papel el peso esta del lado de la Águilas por un buen margen, esto es indudable, pero viendo que se juegan dos juegos en casa después de este ante Cargadores y Pieles Rojas, los Vaqueros pudieran estar 7-5 restándoles cuatro juegos. Pase lo que pase, hay cuerda todavía para estos Vaqueros siempre y cuando regresen los ausentes de manera efectiva.         

Clave 4 – A surcar los aires. La ofensiva del coordinador ofensivo Scott Linehan no le pide soltar el brazo a Prescott de manera frecuente, siendo los pases cortos al centro la receta luego de establecer el juego por piernas. Para este juego, Prescott se ve obligado a cargar casi por si solo con la ofensiva vaquera, al grado de verlo en momentos salir en jugadas personales por diseño. La clave aquí es desbalancear a la defensiva, sabiendo que se les puede tirar, contando con pases controlados con Cole Beasley, Terrence Williams y Dez Bryant, apoyándose con Jason Witten y poner en escena a James Hanna. Brice Butler ahora estará obligado a separarse de la marca, y es claro que pudiera salir alguien inesperado de la ofensiva que se lleve el balón al más valioso tomando en cuenta que los Vaqueros saben que van a remar contra la corriente, y de ser así, porque no soltarle las riendas a Prescott y apostarle a un comienzo explosivo.     

Clave 5 – Vaya rivalidad. Son estos los momentos para tomar nota del adagio que, "en cualquier domingo cotidiano", el David le puede dar al Goliat con una simple sonda.  Son tantas las ocasiones que estos dos equipos se han enfrentado, y los diferentes tintes, ambientes y circunstancias han sido de todos tipos y sabores.  Lo que si es cierto es que estas Águilas van a salir a destruir a los Vaqueros, para el regocijo de sus seguidores en la Ciudad de la Hermandad, que profesan un odio profundo y amargo para el equipo tejano. Ganarle a estos Vaqueros en domingo en la noche ante el universo de la NFL, luego del juego en el mismo escenario que se decidió con un pase sorpresa de Bryant para Witten en tiempo extra, y el juego final en el despido de Tony Romo en Philadelphia, sería para Pederson el poder establecer quien manda en la liga a estas alturas. Dependerá grandemente de estos Vaqueros el decidir que tanto valdrá la pena pelear y hasta que momento para que no se allane su casa.

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