Llego el momento de confrontar el pasado.
Luego de trece temporadas al mando del legendario equipo de Vince Lombardi y la tundra sagrada del Lambeau Field, el ahora timonel del equipo de Jerry Jones regresa al escenario de sus glorias. Â
Para McCarthy es el ir a otro juego del calendario ediciĂłn 2022.  Pero para todos los demĂĄs, se puede suponer sin rodeos que este no es solamente un juego de los de temporada regular.Â
Durante toda la semana se le preguntĂł una tras otra ves la importancia de su regreso, y aun cuando su aspiraciĂłn es la de decir que no hay mucho que buscarle, es obvio que salir del legendario coso con una victoria es algo que simple y sencillamente no tiene mote luego de su salida a mitad de temporada en el 2018.
Para empezar es la primera ocasiĂłn que regresa un entrenador en jefe del pasado del legendario equipo a enfrentar a estos mismo Empacadores, un equipo con el que se abriĂł el largo historial de la liga que eventualmente se convirtiĂł en la National Football League (NFL) que conocemos hoy.   Â
Ahora, el equipo de Matt LaFleur llega en una situaciĂłn por demĂĄs precaria, luego de perder cinco al hilo donde el verdadero acabose es el haber perdido por el risible marcador de 15-9 ante los pobres Leones de Detroit, siendo este de las peores defensivas entre los 32 equipos de la liga. Â
El Jugador Mas Valioso del 2020 y 2021, el mariscal de campo Aaron Rogers, parece haber perdido la vara mågica.  La salida de Davonte Adams ha resultado en una verdadera catarsis que ni él ni el mismo presidente del club Mark Murphy se hubieran imaginado.
Gente como Sammy Watkins, Allen Lazard y el ala cerrada Robert Tonyan no le han servido de nada para reemplazar a Adams, y es ahora bajo las luminarias candentes de la fanaticada en general de la liga que las cosas se han puesto por demĂĄs tĂ©tricas.  Â
Estos Packers llegan como la ofensiva total nĂșmero 14 de la liga, 14 en el acarreo y la 15 al momento de surcar los aires.  A la defensiva son la seis total, 26 ante el acarreo y la dos ante el pase.  Su rival dominical arrastra la ofensiva total nĂșmero 22 de la liga, once con el acarreo y 25 pasando, mientras la defensiva de Dan Quinn es la diez total, 24 ante el acarreo y la cuatro ante el pase.
Pareciera mĂĄs parejo el cotejo ante un pĂșblico expectante.
Con tanto historial de por medio, les paso las cinco claves del juego donde se verĂĄn las caras dos equipos que van en direcciones opuestas.
Clave 1. Juego de corredores. Los nĂșmeros delatan que este juego se va a decidir con el acarreo, viendo que ambos equipos tiene caballitos de batalla y no defienden del todo bien el juego terrestre. Tanto LaFleur como McCarthy tienen dudas que si sus corredores titulares van a poder salir con todos los fierros. Zeke Elliott practicĂł a medias mientras que Aaron Jones ha sido catalogado como cuestionable, mientras que los segundones y volantazos A.J.Dillon y Tony Pollard van a ver muchas repeticiones ante un pronĂłstico benĂ©volo de la Madre Naturaleza. El establecer el juego terrestre serĂĄ meta nĂșmero uno de ambos equipos desde el silbato inicial.
Clave 2. Saquen de quicio al susodicho mas valioso. El mariscal de campo verde y amarillo ha defendido su honor aun con las cinco derrotas consecutivas ante Gigantes, Jets, Comandantes, Bills y su rival divisional Leones de Detroit. Es obvio que trae el mundo a cuestas como el verdadero Atlas en el que se ha convertido siendo la cara de la franquicia. Para Micah Parson y compañĂa sera vital que le lleguen temprano y seguido aprovechando que la lĂnea ofensiva de casa no tiene la seguridad ante los embates contrarios. Hay que llegarle con todo desde el principio sin cuartel y aquĂ es cuando el ser la defensiva nĂșmero cuatro de la liga ante el pase tiene que hacerse valer para cerrarle las avenidas aĂ©reas y mandarlo a la lona.
Clave 3. Juego aĂ©reo. Mientras Rogers extraña a su receptor predilecto Adams, Dak Prescott tambiĂ©n anda en busca de su propio juego vertical. El poder estirar el terreno de juego con la amenaza del juego de bombas es parte vital de cualquier equipo protagonista, y estos dos equipos andan en busca del elixir que les dĂ© esta caracterĂstica. Ninguno de los dos la tiene. Green Bay no tiene el armamento para tirar largo, y los Cowboys pues andan hasta pensando en revivir la carrera de un tal Odell Beckham Jr. porque ni CeeDee Lamb ni Michael Gallup parecen listos para su propio "close-up" ante las cĂĄmaras. Lo cierto es que los pases controlados y cortos van a estar al orden del dĂa, y la diferencia pudiera ser que de un lado se cuenta con Tonyan, mientras que el otro lado la tripleta de Dalton Schultz, un tocado Jake Ferguson y el prometedor Peyton Hendershot van a ser la diferencia al momento de mover las cadenas.
Clave 4. Bajas sensibles. Los Vaqueros van a estar sin el apoyador Anthony Barr, que ha sido clave en cuanto a formar un duo sĂłlido con Leighton Vander Esch. Pero aparte del juego de Barr, es su propia experiencia de tantos años con los Vikingos enfrentando una tras otra ves a los que fuera su rival divisional de la DivisiĂłn Norte del la NFC. Por su lado los pupilos de LaFleur van a extrañar a su propio apoyador Rashan Gary, luego de salir con lesiĂłn en la rodilla ante los Leones y puesto en la lista de lesionados. Lo bueno para los de la estrella solitaria es que llegan de su descanso obligado con la recuperaciĂłn de jugadores que para estas alturas aquejan alguna dolencia, donde gente como Malik Hooker, Sam Williams, Donovan Wilson y Dorance Armstrong se declaran listos para el desafĂo ante el monstruo de 81,442 cabezas del Lambeau Field. Para los Empacadores gente como Krys Barnes, De'Vondre Cambell, Rasul Douglas y Eric Stokes no tuvieron el lujo de irse a la playa con el coco-loco en la mano en son de recuperaciĂłn.
Clave 5. Es tiempo de declararse listos. Los Cowboys ahora si quieren convertirse en serio protagonista de su propia divisiĂłn y el salir de Lambeau Field con una victoria es aseveraciĂłn absoluta. Hay tantos recuerdos de confrontaciones en el histĂłrico recinto, desde el TazĂłn del Hielo en 1967 hasta la "si-atrapada-no-atrapada" de Dez Bryant en el 2014, los Cowboys saben que poder solventar a un Packers herido es simplemente el pase a otra semana sin la duda que si son o no son. Dallas llega como favorito por cinco puntos, que se ha reducido a cuatro, pero para ganar este juego es de nuevo no andar en busca de fanfarrias ni elogios, es el llegar ante un lleno escandaloso en un dĂa otoñal y regresarse al metroplex con una victoria para luego pensar en volver a viajar y enfrentar a un equipo de Minnesota que de pronto anda volando alto. Primero lo primero, hay que darle la victoria a Mike McCarthy para que se sienta el vuelo necesario para la segunda vuelta de la temporada ediciĂłn 2022.













