Una temporada difícil se volvió aún más dura.
Una temporada complicada se volvió aún más difícil. En un juego que muchos esperaban que los Dallas Cowboysganaran en casa, el equipo terminó cayendo 27-17 ante unos Arizona Cardinals que habían perdido sus cinco partidos anteriores.
Ahora, los Cowboys llegan a su semana de descanso no solo con preocupaciones en la defensa, sino también, quizá, en la ofensiva. Por segunda semana consecutiva, Dak Prescott y compañía tuvieron problemas, sin lograr anotar un touchdown hasta el último cuarto, cuando el resultado ya estaba prácticamente decidido.
Capturado cinco veces y bajo presión durante casi toda la noche, el mariscal de campo de Dallas completó 24 de 39 pases para 250 yardas, con un touchdown y una intercepción, para un índice de pasador de 77.9. CeeDee Lamb lideró el ataque aéreo con 85 yardas por recepción, mientras que George Pickens y Jake Ferguson aportaron 79 y 50 yardas, respectivamente.
Pero a pesar de acumular 333 yardas totales, Dallas solo convirtió el 33 % de sus oportunidades en la zona roja, fallando dos veces en cuarta oportunidad y gol.
Mientras tanto, la defensa de los Cowboys volvió a ser una montaña rusa, permitiendo que los Cardinals convirtieran el 54 % de sus terceras oportunidades y el 75 % de sus posesiones en la zona roja. En total, Arizona acumuló 340 yardas y dominó el tiempo de posesión por 33:20 a 26:40.
Con la leyenda local de preparatoria Kyler Murray aún fuera por lesión, los Cardinals recurrieron al mariscal suplente Jacoby Brissett, quien desmanteló a Dallas con 261 yardas aéreas y dos touchdowns, logrando un índice de pasador de 115.1. El receptor Marvin Harrison Jr. fue una pesadilla, especialmente en la primera mitad, terminando con siete recepciones y 96 yardas, la mejor marca de su carrera.
Primer Cuarto
El inicio del juego resultó demasiado familiar. Los Cowboys parecían avanzar con facilidad en su primera posesión… hasta que llegaron a la zona roja. La serie se estancó, y en cuarta y gol desde la yarda 4 de Arizona, el entrenador Brian Schottenheimer decidió jugársela, solo para que Prescott fuera capturado con una pérdida de 7 yardas.
Después de eso, los Cardinals emprendieron una marcha de 15 jugadas y 60 yardas, consiguiendo las yardas necesarias en cuatro terceras oportunidades, una de ellas gracias a una penalización de Dallas. Los Cowboys lograron limitar el daño, pues Arizona se conformó con un gol de campo de 48 yardas, los primeros puntos del partido, 3-0.
Segundo Cuarto
Obligados a despejar desde lo profundo de su territorio, los Cowboys dejaron a los Cardinals comenzar su siguiente serie en la yarda 47 de Dallas. Menos de tres minutos después, y pese a iniciar la posesión con una captura de 10 yardas a Brissett, Arizona llegó a la zona de anotación. El mariscal conectó tres veces con Harrison para un total de 31 yardas, culminando con un pase de touchdown de 4 yardas.
Finalmente, los Cowboys mostraron algo de vida, gracias a los equipos especiales. Con los Cardinals despejando desde su propia yarda 36, Sam Williams irrumpió para bloquear la patada, y el balón rebotó hasta la zona de anotación, donde Marshawn Kneeland se lanzó sobre él para el primer touchdown por despeje bloqueado desde la temporada 2021.
Lamentablemente, el impulso duró poco. Con 3:50 por jugar en la mitad, los Cardinals tuvieron tiempo suficiente para recorrer el campo y anotar nuevamente. Brissett completó 5 de 6 pases para 59 yardas y luego cruzó la línea de gol él mismo con un sneak de una yarda.
Con solo 41 segundos en el reloj y sin tiempos fuera, los Cowboys lograron posicionarse para que el pateador Brandon Aubrey intentara un gol de campo de 68 yardas, que habría empatado el récord más largo en la historia de la NFL (establecido un día antes). Aunque el intento tuvo la distancia, el balón se fue desviado a la izquierda, por lo que Dallas se fue al descanso perdiendo 17-7.
Tercer Cuarto
Las cosas no mejoraron al iniciar la segunda mitad. En la primera jugada del cuarto, Brissett conectó con el receptor Michael Wilson para una ganancia de 50 yardas, y dos jugadas después encontró al ala cerrada Trey McBride para el touchdown, poniendo a los Cowboys abajo por 17 puntos.
Dallas respondió con un gol de campo de 26 yardas, pero una vez más desperdició una oportunidad de anotar touchdown tras tener primera y gol. Prescott guió a su equipo rápidamente por el campo, pero la serie se estancó en la yarda 5 después de sufrir una captura de 9 yardas. Esta vez, Schottenheimer optó por los tres puntos seguros.
La decisión cambió poco el panorama, ya que los Cardinals respondieron con su propio gol de campo de 26 yardas, aumentando la ventaja a 27-10. En esa serie, consumieron 5:33 del reloj, recorriendo 65 yardas en 12 jugadas.
Último Cuarto
En la primera jugada del último cuarto, el partido prácticamente se decidió. Los Cowboys habían avanzado hasta la yarda 21 de Arizona, destacando un pase de 33 yardas de Prescott a Lamb. Pero en cuarta y tres, Schottenheimer decidió arriesgarse, y el pase de Prescott a Lamb fue desviado, sellando el destino del equipo.
Aun así, los Cowboys no se rindieron fácilmente. Prescott condujo una serie de 78 yardas en siete jugadas, completando 4 de 5 pases para 43 yardas, incluyendo dos lanzamientos a Ryan Flournoy. El segundo fue un pase de touchdown de 5 yardas, el primero de la ofensiva en la noche.
Dallas volvió a mover el balón en su siguiente posesión, con Prescott aprovechando la floja secundaria de Arizona. Pero en tercera y 12 desde la yarda 37 de Arizona, Williams recibió un pase corto y avanzó por la banda derecha, solo para perder el balón al ser tacleado. El linebacker Akeem Davis-Gaither recuperó el balón para los Cardinals.
Una intercepción final de Prescott puso la cereza al mal momento antes de que terminara el partido, aunque ya no afectaba el resultado. Los Cowboys llegan a su semana de descanso con récord de 3-5-1, y su próximo compromiso será en Las Vegas ante los Raiders, en otro duelo de lunes por la noche dentro de dos semanas.












