Puede que los fanáticos no confíen en él, pero los Cowboys todavía sí… o al menos eso es lo que dice el coordinador ofensivo Scott Linehan.
Kellen Moore está iniciando su sexto año en la NFL, pero su futuro sigue incierto. En un período de cinco temporadas, Moore sólo ha jugado un total de tres partidos.
Se suponía que él fuese el respaldo de Tony Romo en la temporada 2016, pero una inesperada fractura en el tobillo causó que Moore estuviese fuera del campo durante la temporada completa.
Ahí fue que Dak Prescott tuvo la oportunidad de brillar y convertirse en el mariscal de campo titular de los Cowboys.
Una historia muy distinta a la de Moore, quien también tuvo la oportunidad de tratar de liderar a la ofensiva del equipo en el 2015 durante la ausencia de Romo – pero para ser justos hay que tener en cuenta que Moore no contaba con la ayuda de Ezekiel Elliott, que fue gran factor del triunfo de Prescott.
No obstante, Linehan confía absolutamente en el talento de Moore. Ahora mismo los Cowboys sólo tienen a tres mariscales de campo en su lista aparte de Prescott – el novato Cooper Rush, el veterano Zac Dysert y obviamente Kellen Moore.
Ahora la pregunta es la siguiente, ¿quién será el respaldo de Prescott?
Pues el candidato más obvio sería Moore. Conoce el sistema, es inteligente, lanza con precisión, sabe anticipar jugadas y sus compañeros de equipo lo respetan mucho.
A pesar de que todo eso suena muy bien, toca recordar que Moore lanzó un total de seis intercepciones en sus tres partidos jugados en la temporada 2015 – motivo que justifica el sentimiento de los fans cuando escuchan mencionar su nombre.
Moore tendrá que mostrar su valor en el equipo mientras compite contra Dysert y Rush en el campamento de entrenamiento. Su "supuesto" rol como respaldo todavía no está asegurado.
Es cierto que Moore cuenta con todo el apoyo de Linehan, pero su tiempo con los Cowboys prontamente podría llegar a su fin si no resalta durante el campamento de entrenamiento y en los juegos de pretemporada.
Cabe recordar que los Cowboys podrían contratar a otro mariscal de campo en cualquier momento – la cuestión es que aparezca uno que valga la pena.
