OXNARD, California – El dueño y gerente general de los Cowboys, Jerry Jones, reveló en el próximo documental de Netflix "America's Team: The Gambler and His Cowboys", que se estrena la próxima semana, que fue diagnosticado con cáncer en etapa cuatro y logró superarlo.
Jones, de 82 años, habló el miércoles sobre su lucha contra la enfermedad y su perspectiva durante todo el proceso.
"Millones de personas enfrentan dificultades todos los días", dijo Jones. "Hay que tener eso presente en todo momento. No hay duda de que, desde mi punto de vista, la gran vida que tengo la oportunidad de vivir…"
"Estar cerca de este equipo, de la NFL, de los deportes… si necesitas estar rodeado de una actitud positiva cuando enfrentas algo así, yo lo estuve… He sido bendecido por ser parte de la NFL".
Más temprano ese mismo miércoles, el coordinador ofensivo de los Cowboys, Brian Schottenheimer, también reveló que había enfrentado el cáncer en el pasado. Tanto él como Jones hablaron sobre sus respectivas experiencias, y aunque Jones no profundizó en su conversación, sí enfatizó el valor de la vida.
"Siempre hablamos de presión, de desafíos. Una vez le dije a un entrenador, que me comentó: 'Hombre, esa decisión de ir por dos puntos solo suma más presión.' No quería sonar condescendiente, pero le dije: 'Todos los que están viendo en la televisión, todos los que están en las gradas, también están lidiando con cosas. Todos enfrentan presión'", dijo Jones.
"Todos tenemos presión. Agradezcamos que estamos aquí para poder lidiar con ella".
Jones explicó que fue parte de un ensayo clínico con PD-1, un inhibidor de puntos de control inmunológico que ayuda al sistema inmunológico a reconocer y atacar las células cancerosas. En sus palabras, el tratamiento "realmente, realmente, realmente funcionó".
Uno de los efectos secundarios fue que tuvo que reemplazarse ambas caderas debido al daño que el tratamiento causó en sus huesos. Sin embargo, eso fue un precio menor comparado con lo que podría haber sido en el peor de los casos.
"A uno no le gusta pensar en su mortalidad, pero tuve la gran fortuna de contar con personas increíbles que me guiaron en la dirección correcta…", dijo Jones. "Estoy orgulloso de poder estar sentado aquí con ustedes y de poder seguir haciendo lo que hago. Pero [la mortalidad] estaba en el fondo de mi mente".
Como indica el título del documental de Netflix, Jones siempre ha sido un apostador. Para muchos, un encuentro con una experiencia tan devastadora como el cáncer puede cambiar su perspectiva sobre la vida. Para Jones, no fue así, porque ya vivía con una profunda apreciación por lo que lo rodea.
"Estaba con los Cowboys porque quería el trabajo de dirigir a los Cowboys", dijo Jones. "No necesariamente por mis hijos, no necesariamente por nadie más, yo quería ese trabajo. Así ha sido, y cuando tienes pasión y estás completamente inmerso en lo que haces, eso te ayuda a enfrentar los otros desafíos que nos presenta la vida".