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Villalba: No hay donde esconderse luego de tal desastre

Los abucheos de la fanaticada Vaquera con el balón en la yarda dos y formación escopeta fue algo para que el mismo Ripley nunca se hubiera ni halucinado en un repleto AT&T Stadium. 

Pues así fue, y la verdad fue algo difícil de digerir durante el transcurso de esta dolorosa derrota 21-12 a manos de unos supuestos ofensivamente raquíticos Halcones Marinos de Seattle.

No hay vuelta de hoja para estos Vaqueros de Dallas edición 2017. 

La temporada ya se acabó y ante los momios que los tenían como favoritos ante un equipo que se suponía no podía correr el balón, un apoyador en Bobby Wagner que andaba lesionado y una ofensiva unidimensional, pues el resultado fue lo que decían algunos expertos: cuidado con un tal Russell Wilson.      

Pues si fue Wilson el que les dio una verdadera lección en lo que es salir con la frente en alto y creer en si mismo. El regreso de un tal Ezekiel Elliott y el poder posiblemente ser un equipo dominante a la ofensiva simplemente no les resultó y es mas que nada la versión de verse en el espejo y preguntarse... ¿quién soy?.

La temporada Vaquera ya terminó, y ahora lo que queda es una visita a Philadelphia en un juego de mero trámite. Pues que caray, y ahora que podemos esperar en cuanto a reacciones del equipo luego de ver como dejaron dinero en la mesa al puro estilo de todos los que van a estas mesas de juego esperando un resultado favorable.

¿Será que el mismo Jason Garrett se tiene que ir?

Como dirían en mi colonia... no pos guau. Tal parece que la directiva de los Vaqueros quisiera de alguna manera decir que el tremendo cerillo es el director técnico del club en perpetuidad como lo fue en su momento el legendario y desaparecido Tom Landry, pero momento, no es lo mismo andar comparando eras.    

Tom Landry fue el primer entrenador en jefe del equipo del entonces dueño Clint Murchison y el gerente general Texas Schramm le dio un contrato de diez años cuando no podían ni amarrase los zapatos, y los llevó a la cúspide de aquella NFL. Jerry Jones sueña con hacer los mismo con Jason Garrett pero de pronto hay estos momentos donde es indefensible.

Nadie duda de la calidad humana de Garrett. Es sin lugar a dudas una buena persona. Pero el ser buena persona te puede ser exitoso en la NFL. No es pregunta. Es aseveración. 

Es la gran duda de aquí al término de esta temporada 2017. Que por cierto, para ustedes que siguen nuestras transmisiones, vamos a estar en las gradas en Philadelphia congelándolos en un juego completamente irrelevante. 

Esperando nos sigan.

Pero por lo pronto, Feliz Navidad y el mas Prósperos de los Años a todos nuestros amigos de Cadena de Plata. 

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