FRISCO, Texas — Después de lesionarse la rodilla en una recepción de 49 yardas contra los Ravens el sábado, pruebas adicionales revelaron que el receptor de los Cowboys, Jonathan Mingo, sufrió un esguince del ligamento cruzado posterior (PCL) y podría perderse entre cuatro y seis semanas.
Mingo, por quien los Cowboys intercambiaron una selección de cuarta ronda con los Carolina Panthers en la fecha límite de canjes del año pasado, ahora podría comenzar la temporada en la lista de reservas lesionados (IR) y perderse los primeros cuatro partidos de la temporada.
El receptor, que está en su tercer año, había llamado la atención durante el campamento de entrenamiento en Oxnard, generando entusiasmo de cara a su primera temporada completa con los Cowboys. Su recepción profunda contra los Ravens fue la única en la pretemporada, pero suficiente para liderar al equipo en yardas recibidas esa noche.
Tras el partido del sábado, Mingo pudo caminar al vestidor por su propia cuenta, pero el lunes comentó que nunca había lidiado con una lesión así en su carrera.
"Solo intento tomar medidas de precaución", dijo Mingo sobre la lesión. "Sentí algo un poco raro, así que fui y hablé con el equipo médico [de los Cowboys]. Solo intento hacer las cosas de la manera correcta".
Los recortes finales del equipo están programados para el 26 de agosto, fecha en la que los Cowboys pueden colocar hasta dos jugadores en la lista de lesionados para crear espacio en el roster de 53 jugadores.
Si el equipo decide colocar a Mingo en la reserva de lesionados el próximo martes, el lugar libre podría ir a otro receptor: Ryan Flournoy, Jalen Cropper, Jalen Brooks, Traeshon Holden y Josh Kelly podría quedarse con ese lugar adicional.
Eso hace que las últimas dos prácticas con hombreras, así como el partido final de pretemporada contra los Falcons este viernes, sean aún más importantes para los receptores, quienes ahora tienen una oportunidad de ganarse un lugar que quizás no habría estado disponible si Mingo no se hubiera lesionado.
